Vanessa salía de un entrenamiento del gimnasio cuando fue interceptada y fotografiada por un paparazzi. Y como si no le importase que debajo de la ropa no llevaba sostén, caminó muy relajada por Los Angeles frente a la cámara.
Primero, no es lo mismo lucir un busto sin sosten, pero protejido por un hermoso vestido, que lucirlo en prendas todas sudadas. Y segundo, existe algo que se llama gravedad, que eso no sé si Vanessa conoce, aunque a juzgar por el talle que vemos en la foto, mucho no hay para caerse.
Vanessa es hermosa con cualquier prenda, pero si quiere seguir sosteniendo en su lugar ese busto y esa imagen de mujer sexi que estaba empezando a aflorar, mejor que siga manteniendo el misterio y no ande tan al descubierto, ¿no creen?